El gobierno de Donald Trump ordenó una pausa temporal en las redadas migratorias ejecutadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), tras el aumento de la desaprobación pública y las protestas en zonas estratégicas para la próxima campaña.
Industria agrícola y hotelera, las más afectadas
Según reveló The New York Times, el Departamento de Seguridad Nacional instruyó a ICE a suspender operaciones en sectores clave como la agricultura, restaurantes y hoteles, debido al impacto económico y electoral que estaban generando.
Funcionarios confirmaron la medida a través de un correo oficial, donde se aclaró que la orden busca reducir tensiones en regiones donde Trump necesita respaldo para las elecciones.
Solo seguirán los arrestos de “delincuentes graves”
La portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, indicó que seguirán las instrucciones del presidente y que se enfocarán en deportar a “los peores delincuentes extranjeros ilegales”, manteniendo el discurso de mano dura sin afectar industrias sensibles.
Redadas generaban rechazo en estados clave
La decisión ocurre tras más de una semana de protestas en Los Ángeles contra las redadas, y luego de que el propio Trump reconociera que estaban perjudicando al sector agrícola, especialmente en California, donde la mano de obra inmigrante es esencial.
Desde su regreso a la presidencia en enero, Trump intensificó la política antiinmigrante. Su equipo incluso instruyó a ICE a realizar unos 3.000 arrestos diarios, lo que aceleró la operación hasta enfrentar resistencia económica y social.