El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdán, rechazó este jueves la resolución aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU que llama a establecer pausas humanitarias urgentes y amplias en Gaza y dijo que esta medida “está desconectada de la realidad y carece de sentido”.
“Independientemente de lo que decida el Consejo, Israel seguirá actuando de acuerdo con el derecho internacional, mientras que los terroristas de Hamás ni siquiera leerán la resolución, y mucho menos la acatarán”, escribió Erdán a través de la red social X (antes Twitter).
“Es lamentable que el Consejo siga ignorando, no condenando o incluso mencionando la masacre que Hamás llevó a cabo el 7 de octubre, que condujo a la guerra en Gaza. ¡Es realmente vergonzoso!”, agregó el embajador, que advirtió que “Israel seguirá actuando hasta que Hamás sea destruido y los rehenes sean devueltos”, en alusión a los 239 rehenes capturados durante el ataque del grupo islamista contra Israel, que dejó además más de 1.200 muertos.
“La estrategia de Hamás es deteriorar deliberadamente la situación humanitaria en la Franja de Gaza y aumentar el número de víctimas palestinas para motivar a la ONU y al Consejo de Seguridad a detener a Israel”, denunció Erdán, cuando el número de fallecidos en el enclave por los bombardeos israelíes desde el 7 de octubre supera los 11.300.
La resolución adoptada este miércoles por el Consejo de Seguridad llama a establecer pausas humanitarias “urgentes y amplias” en los combates durante “un número suficiente de días” para que pueda entrar ayuda en la Franja de Gaza por el bien de los civiles “y especialmente los niños”, y que se pueda evacuar a los infantes heridos y sus cuidadores.
El máximo órgano ejecutivo de la ONU aprobó una resolución propuesta por Malta con doce votos a favor, ninguno en contra y tres abstenciones: las de Estados Unidos, Reino Unido y Rusia, que tienen poder de veto.
El texto también llama a la liberación inmediata e incondicional de los rehenes tomados por Hamás, aunque no incluye una condena explícita de los ataques del grupo islamista palestino contra Israel, algo que criticaron Estados Unidos y Reino Unido.
La embajadora estadounidense, Linda Thomas-Greenfield, dijo precisamente que “no podía votar sí en un texto que no condenaba a Hamás” y, aunque se mostró “decepcionada” por eso, destacó que es la primera resolución adoptada que “menciona” su nombre.
Antes del voto, el embajador ruso Vasili Nebenzia intentó que el texto pidiera “una tregua humanitaria inmediata, duradera y sostenida que conduzca al cese de las hostilidades”, pero no tuvo éxito por el bloqueo de EE.UU., pese a lograr cinco síes.
En respuesta a la aprobación de esta resolución, el portavoz del Ministerio de Exteriores israelí instó al Consejo de Seguridad y a la comunidad internacional a exigir “la rápida liberación de todos los secuestrados israelíes, tal como estipula la resolución”.
“Israel espera que el Consejo de Seguridad condene inequívocamente a Hamás y aborde la necesidad de crear una realidad de seguridad diferente en Gaza. No hay lugar para treguas humanitarias prolongadas mientras 239 secuestrados estén en manos de los terroristas de Hamás”, escribió el portavoz, Lior Haiat, a través de la red social X.