Un bombardeo israelí sobre un hospital de la ciudad de Gaza causó este martes al menos 500 muertos, confirmó a EFE una portavoz del Ministerio de Sanidad de la Franja, controlada por el grupo islamista Hamás.
Supone la mayor masacre en el enclave de las cinco guerras que ha habido entre las milicias palestinas de Gaza e Israel desde 2008.
El ataque al Hospital Al Ahli, en la ciudad de Gaza, se produce el undécimo día de guerra entre Israel y las milicias de la Franja, marcado por los intensos bombardeos en toda la Franja, donde miles de civiles se refugian en centros sanitarios, desbordados de heridos.
“La masacre en el Hospital Árabe al-Ahli no tiene precedentes en nuestra historia. Si bien hemos sido testigos de tragedias en guerras y días pasados, lo que ocurrió esta tarde equivale a un genocidio”, afirmó Mahmud Basal, portavoz de la Defensa Civil de Gaza.
Se trata también del ataque con mayor número de víctimas mortales cometido hasta ahora, desde que el pasado 7 de octubre estalló la guerra entre las milicias palestinas de Gaza e Israel, que se ya acumula más de 3.000 muertos en Gaza y 1.400 fallecidos en territorio israelí.
Según fuentes locales, en el centro sanitario -una institución cristiana perteneciente a la Iglesia Anglicana- había unas 2.000 personas que se estaban refugiando de los bombardeos tras evacuar estos últimos días de sus casas, una dinámica que se ha visto en la mayor parte de hospitales de la Franja.
«La horrible masacre cometida por la ocupación sionista» sobre el hospital, «que dejó cientos de víctimas es un crimen de genocidio», declaró Hamás en un comunicado.
Según agregó, la mayor parte de fallecidos y heridos son «familias desplazadas, pacientes, niños y mujeres» que en los últimos días se albergaban en el lugar.
Mohamed Shtayeh, primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), con control sobre partes de Cisjordania, tachó el ataque de «crimen horrible en una guerra genocida».
También instó al Consejo de Seguridad de la ONU a poner fin a la contienda, «que ha alcanzado un clímax sangriento».
A su vez, Shtayeh también responsabilizó a Naciones Unidas «y los países que apoyan a Israel del crimen» debido «a su silencio».
La masacre se produce justo horas antes de la visita mañana a Israel del presidente estadounidense, Joe Biden, que hasta ahora cerró filas con Israel y respaldó «su derecho a defenderse»·.
EFE consultó al Ejército israelí sobre el incidente, que aseguró estar revisando lo sucedido.
Por su parte, su principal portavoz militar, Daniel Hagari, declaró a prensa israelí que por el momento se desconoce si se trató de un ataque por parte de los aviones de combate de Israel.
Hay muchos bombardeos (israelíes), muchos lanzamientos fallidos de cohetes (de las milicias palestinas) y muchos bulos difundidos por Hamás», afirmó Hagari.
Los once días de guerra entre Israel y las milicias palestinas marcan el conflicto armado con mayores estragos humanos sufridos por Gaza de los últimos años, y casi dos tercios de las víctimas mortales en el enclave son mujeres y niños.