El cuerpo sin vida de un ciudadano venezolano fue hallado dentro de una maleta flotando en el río Piraí, en las cercanías del puente del Urubó, en Santa Cruz de la Sierra. El macabro hallazgo fue realizado por pescadores locales el pasado 15 de mayo.
La víctima fue identificada como Javier Alfonso Saavedra, de 32 años, gracias a los tatuajes que llevaba. Según reportes forenses, el cuerpo presentaba signos de violencia, incluyendo fracturas, hematomas y lo que los especialistas describieron como “ojos de mapache”, lo que sugiere traumatismos en la cabeza.
El fiscal Daniel Ortuño indicó que, por las características del caso, se presume que se trata de un asesinato. Además de los golpes en el tórax y la fractura del tabique nasal, también se detectó una fractura en uno de los dedos de la mano izquierda.
En el marco de las investigaciones, la policía detuvo a Denise Paola Martines, expareja del fallecido y también de nacionalidad venezolana. La mujer fue trasladada a la cárcel de Palmasola tras incurrir en contradicciones durante su declaración ante el Ministerio Público.

Según el fiscal Franz Delgadillo, existen elementos que podrían vincular a Martines con una estructura criminal organizada. Mensajes de texto hallados en su teléfono reforzarían esa línea de investigación. Aunque ella alegó haber viajado desde Perú a Bolivia por solicitud de la madre de Saavedra, la Fiscalía sostiene que tenía conocimiento del crimen y no informó a las autoridades, lo que la convierte en presunta encubridora.
Las autoridades tampoco descartan la posible conexión de la víctima y de la detenida con el Tren de Aragua, una organización criminal de origen venezolano con operaciones en varios países de América Latina. Martines enfrentará una medida de detención preventiva por 180 días mientras avanzan las averiguaciones.