Los ministros de Asuntos Exteriores del Grupo de los Siete (G7) han denunciado la “falta de legitimidad democrática” en la reciente investidura de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela. En una declaración conjunta, el bloque expresó su preocupación por la ausencia de elecciones libres y justas, así como por la crisis política y humanitaria que atraviesa el país (Europa Press).
Estados Unidos calificó la toma de posesión de Maduro como una “farsa” y anunció nuevas sanciones contra su régimen. Por su parte, la Unión Europea y varios de sus Estados miembros reiteraron su rechazo al proceso, mientras que el Secretario General de la ONU, António Guterres, instó a la liberación inmediata de los opositores detenidos recientemente.
LEA TAMBIÉN: Edmundo González promete ingreso seguro para defender la democracia venezolana
En contraste, Rusia, uno de los principales aliados de Venezuela, felicitó a Maduro por su investidura, lo que evidencia la división internacional respecto al reconocimiento del gobierno venezolano. Otros países, como Francia y Brasil, han ofrecido su mediación para buscar una salida negociada a la crisis.
La situación en Venezuela sigue siendo un foco de tensión en la política internacional, con llamados urgentes para restaurar la democracia y garantizar los derechos fundamentales de su población.
Fuentes: Europa Press, Huffington Post, El País.