El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó una línea de crédito flexible (LCF) por 1.500 millones de dólares para Costa Rica, en respaldo a sus políticas económicas y su solidez institucional.
Monto será de uso precautorio
El acuerdo, válido por dos años, le permitirá al país acceder a los fondos solo si lo necesita, en caso de choques externos que afecten su economía.
“Costa Rica tiene fundamentos sólidos y una impresionante reforma económica”, declaró Kenji Okamura, subdirector gerente del FMI.
Este tipo de línea solo se otorga a países con buen desempeño fiscal y marcos de política estables.
Estabilidad y confianza de mercado
El Banco Central de Costa Rica celebró la aprobación y explicó que el crédito es de uso estrictamente precautorio, no inmediato.
Entre los posibles riesgos identificados por el Gobierno están:
- Desaceleración de socios comerciales
- Tensiones geopolíticas
- Medidas proteccionistas
- Salida abrupta de capitales
Mejor acceso a financiamiento
Según las autoridades, esta línea de crédito reforzará la credibilidad fiscal, aumentará la resiliencia financiera y mejorará el acceso a mercados internacionales.
