El Ministerio de Salud de Costa Rica reportó este domingo que el volcán Poás registró un aumento continuo en la concentración de material particulado y dióxido de azufre, por lo que mantiene un monitoreo para evaluar los cambios de la situación.
Durante este viernes y sábado la Estación de Monitoreo de Calidad del Aire del Ministerio de Salud y la Universidad Nacional han registrado “un incremento en las concentraciones de SO2 (dióxido de azufre) y PM2.5 (partículas menores a 2,5 micras), explica el informe del ente de salud.
Agregó que “el dióxido de azufre superó el valor límite horario de la norma nacional, al encontrarse concentraciones promedio de 226.7 y 191.1 ppb”.
Además, el promedio diario de las partículas tuvo un comportamiento dinámico. Estas partículas, al igual que el dióxido de azufre, superaron el límite de la norma nacional, con un valor promedio de 36.1 ug/m3.
Por su parte, el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica también alertó sobre la presencia de fuertes olores azufrados durante la noche y madrugada.
Ante estos casos, el Ministerio de Salud recomendó a la población mantenerse informados de los comunicados que emitan los Comités Locales de Emergencia, evitar actividades al aire libre, no restregarse los ojos, lavar los ojos con agua, mantener ventanas y puertas cerradas.
Si debe estar un tiempo expuesto a ceniza y gases del volcán por actividades laborales, utilizar mascarilla.
El Ministerio de Salud indicó que continuará vigilante a la emisión de gases del Volcán Poás y estará informando a la población cualquier eventualidad que se presente.
Entre 2017 y 2018 el Parque Nacional Volcán Poás estuvo cerrado por 16 meses debido a la constante actividad de gases y ceniza, lo que causó afectación económica a las comunidades cercanas que dependen del turismo.
El volcán Poás, cuyo cráter se ubica a 2.708 metros de altura, es uno de los más activos de Costa Rica,con una salida constante de gases.
