El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó este jueves (20.04.2023) que el polémico avión presidencial, que su Gobierno ofertaba desde el inicio de su administración en diciembre de 2018, fue vendido al Gobierno de Tayikistán, que hizo un depósito de 1.658 millones de pesos (unos 92 millones de dólares y 82 millones de euros).
“Informo al pueblo de México que hoy se celebró el contrato de compra-venta del avión presidencial”, escribió López Obrador en un mensaje en redes sociales que acompañó de un video donde se mostraba la aeronave y se le ve ocupando un asiento.
“El gobierno de Tayikistán depositó 1.658 millones 684.400 pesos, de conformidad con el avalúo oficial, a la cuenta del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado”, añadió.
Además, el mandatario ratificó que el dinero obtenido se invertirá en dos hospitales, en Tlapa, Guerrero y en Tuxtepec, Oaxaca, sur de México, que serán construidos por los ingenieros militares e inaugurados antes de terminar su mandato, en septiembre de 2024.
El presidente mexicano había dicho en varias ocasiones que no lo vendería por menos de 110 millones de dólares, el valor del primer avalúo, porque era malbaratarlo, pero al final no recibió esa cantidad.
Este jueves, López Obrador anunció por la mañana en su conferencia diaria del posible acuerdo.
“Hay un acuerdo (…) no sé si ya se firmó, entonces vamos a esperarnos, pero sí hay esa posibilidad”, declaró el mandatario.
Una aeronave “muy lujosa y extravagante”
Desde que asumió la Presidencia en diciembre de 2018, López Obrador intentó vender el Boeing 787 adquirido por el presidente Felipe Calderón (2006-2012) por un controvertido precio de 218,7 millones de dólares, pero que llegó a México en 2016 durante la presidencia de Enrique Peña Nieto (2012-2018)
López Obrador, quien incluso intentó rifar el vehículo en la Lotería Nacional en 2020, ha alegado en diversas ocasiones que la aeronave es “muy lujosa” y “muy extravagante”, por lo que su Gobierno no ha podido venderla, aunque fue una de las principales promesas de su campaña.
“Lo del avión se está viendo, hay la posibilidad de que se venda, no puedo decir más”, expuso a la prensa al tiempo que avanzó la idea de que el dinero fuera para la construcción de los citados hospitales.
La última vez que habló sobre un posible comprador fue en junio pasado, cuando afirmó que el Gobierno de Argentina estaba interesado en la aeronave.
El mandatario, quien promueve una imagen de austeridad en el Gobierno, ha optado por no usar el avión y viajar en vuelos comerciales, además de prohibir a funcionarios públicos que lo utilicen.
La aeronave está en manos del Ejército mexicano, que la almacena en la base militar área de Santa Lucía, al norte de Ciudad de México, donde el Gobierno ha ofrecido alquilarlo para bodas, cumpleaños y eventos corporativos.