abio Abrego estaba en camino a su trabajo y esperaba un autobús a eso de las 4:00 a.m. en Gualaca, una provincia de Chiriquí, en Panamá, a unos 50 kilómetros de la frontera de Costa Rica, cuando escuchó el frenazo agudo de un vehículo. A los minutos todo era llantos, gritos y ruido.
Abrego fue uno de los testigos del accidente de tránsito ocurrido en la zona cuando un autobús que transportaba a unos 66 migrantes a un albergue de Migración en Los Planes, se despeñó por un barranco.
“Yo escuché al bus…. frenó, y escuché la bulla. Vi a dos niños muertos abajo y una señora que quedó atrapada arriba del vidrio del autobús. Había un hombre que estaba sin mano, otro estaba sin cabeza tirado al otro lado… fue traumático”, dijo Abrego a la Voz de América.
En total han muerto al menos 41 personas, según el último informe emitido el jueves por tarde por el gobierno de Panamá, y unas 22 están siendo atendidas en diversos hospitales del país.
La mayoría de los pasajeros que viajaban en el autobús accidentado eran migrantes de Ecuador, Haití y Venezuela, informaron el jueves las autoridades panameñas.
Con información de La Voz de América.