La participación del papa Francisco en los ritos de la Semana Santa dependerán del tiempo en Roma, mientras «mejora» en su convalecencia por sus problemas respiratorios, informó este viernes la Santa Sede.
La Oficina de Prensa vaticana prefiere no hacer previsiones sobre si Francisco estará presente durante la Semana Santa pero asume que esto dependerá de la meteorología romana.
Por el momento, el pontífice argentino ha delegado en el cardenal Leonardo Sandri la misa del Domingo de Ramos, este 13 de abril en la Plaza de San Pedro.
Esta misa abrirá la Semana Santa, con ceremonias tan importantes para los católicos como el Jueves Santo -Francisco solía conmemorar la Última Cena de Jesús lavando los pies a presos y otras personas-; el Vía Crucis en el Coliseo del Viernes Santo o la bendición ‘Urbi et Orbi’ del Domingo de Resurrección.
En los últimos años Bergoglio ha renunciado a presidir el esperado Vía Crucis ante el Coliseo, en abril de 2023 debido a un «intenso frío» y en marzo de 2024 para cuidar su salud.
Francisco, de 88 años, fue ingresado en el hospital Gemelli de Roma el 14 de febrero por una neumonía bilateral y otros problemas que pusieron en riesgo su vida, si bien la terapia le hizo mejorar y recibió el alta el 23 de marzo, después de 38 días.
Luego ha hecho varias apariciones públicas donde se nota la mejoría.